
Cocinas Solares, la aceptación de tecnología por sus múltiples beneficios
Por Noelia Crespo, Ingeniera Ambiental de Inti Illimani
Este proceso de introducir cocinas solares en la Amazonía comenzó en 2015, cuando se realizó un piloto con cuatro familias para ver cómo era la performance de la tecnología en esta zona. Había muchas dudas con respecto a cómo iba a funcionar la Cocina Solar. Después de esta experiencia se vio que la tecnología funcionaba muy bien en esta zona y había una buena aceptación. Posteriormente, surgió la posibilidad de realizar un mayor número de cocinas en la zona en diferentes comunidades.
Para Inti Illimani fue una experiencia enriquecedora no solamente en el aspecto laboral, ya que se lanzaba el proyecto en una nueva zona, sino en el aspecto personal, ya que tanto los técnicos como todas las personas que fuimos visitando las comunidades pudimos redescubrir nuestro país. Al final, es algo totalmente diferente ver por televisión la parte Amazónica, que ir a la zona y conocer la realidad de las familias que viven allí. Es una realidad completamente diferente a las familias de la zona andina. Es un aprendizaje total en el aspecto personal, porque ves que los valores que manejan las familias son completamente diferentes.
Son familias que serían catalogadas como ‘pobres’ en las ciudades. Pero te das cuenta de que no son pobres: tienen árboles, salen a cazar, obtienen la comida del monte, cultivan. El dinero no les es algo tan necesario. Al final, personalmente te cuestionas muchas cosas. Te cuestionas sobre la definición del ‘progreso’, por ejemplo, la definición de ‘calidad de vida.’ Porque cuando veíamos a las familias llegar al curso-taller, no eran familias que se veían pobres ni se sentían tristes: eran familias con estilos de vida diferentes a los nuestros, en las ciudades. Para el equipo fue también el tema de adaptarse, aprender a adaptarse a otra cultura, a otras formas de trabajo, a otro clima, a los insectos… Creo que desde todo punto de vista para nosotros fue una gran experiencia, tanto de reconocimiento como también de aprendizaje.
La cocina solar: entre la emoción por su funcionamiento y el ahorro de tiempo
Vimos la aceptación de las familias a esta nueva tecnología. A las familias les gustó, fue la sorpresa, porque la verdad es que la Cocina Solar es una tecnología muy ajena incluso en ámbitos urbanos, aun más en este ámbito, donde la gente ni siquiera ha pensado en la Energía Solar. Sin embargo, pese a ser tan ajeno, durante los cursos taller vieron que la comida salía. El último día fueron súper abiertos y la utilizaron con confianza. Se veía la emoción en sus caras al ver cómo salía su pescado, sus comidas típicas del lugar. Percibíamos que realmente estaban felices de llevarse las cocinas a sus comunidades.
Tanto en comunidades de la parte andina como amazónica la cocción es mayormente a leña. Esto implica que las mujeres -sobre quienes generalmente recae la tarea de cocinar- tienen que estar al lado del fogón para evitar el riesgo de quemar sus casas, por ejemplo. Esto es algo que las tiene prisioneras. En cambio, con la Cocina Solar ellas ponen la comida y luego puedan hacer otras cosas. Ellas mismas lo dicen: “Dejo todo preparado y me voy”. Que las cocinas solares hacen ahorrar tiempo, es algo tangible. Pese a que la cocción es más larga, no tienen que estar ahí atizando permanentemente el fuego.
Extractivismo en la Amazonía
Cuando estábamos en la comunidad de Eduardo Abaroa, de noche pasaban trailers con troncos inmensos, de arboles gigantes. En ese momento te preguntas ¿esos camiones serán legales o no? Ahí te das cuenta del extractivismo que existe, la deforestación, por parte de empresas que no creo que sea legales. Una cosa es hablar de la Amazonía desde lejos, otra cosa es ir y darte cuenta de toda la biodiversidad y riqueza que hay en el lugar. Y que está en peligro. La misma gente te cuenta que ahora los animales entran a sus casas, porque como se ha deforestado tanto no tienen donde ir, están como escapando porque el bosque se va recorriendo. Visitar esas regiones de Bolivia sirven para empaparse un poco de la realidad. La gente del lugar defiende la Amazonía, los árboles, porque al final ellos comprenden que sin esos árboles no tienen comida.
Es una pena que nuestro presidente se preste para esto que de una u otra forma benéfica a unos cuantos a causa de la anvision del poder. Y lo que más molesta Es que supuestamente el es uno de los defensores del derecho de la madre tierra y de los pueblos indígenas. Que se baya con ese hueso a engañar a otro perro. Pero a nuestros pueblos indígenas que deje de usarlos y que sobretodo los dejé vivir con sus propios cosmovisión de los pueblos.
Se q es difícil que les dejen transportar sus productos. Hay q sacar permisos para autos los q tienen y por medio de Internet podríamos elegir nuestra compra y pagar online… es urgente q los productores directamente hagan llegar sus productos antes q los supermercados.. paraq ustedes decidan los precios y aun precios de transporte y cuidados del distribuidor